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Friday, May 1, 2009

Lo mismo un burro que un gran profesor? Que no te agarre la gripe en la América Latina "progresista"...

En estos dias convulsionados donde todos corren a la farmacia al segundo estornudo, es tal vez un buen momento para recordar a los idiotas utiles del "antiamericanismo" y la "teoria de la dependencia" lo que cuesta su empecinada apuesta a los burros, a igualar para abajo y a hambrear y humillar al que sabe hasta que se va.

Mientras los "gobiernos populares" de Venezuela, Cuba y Argentina ahuyentan a sus investigadores y cientificos con sueldos hambre y cazas de bruja al reves (sin "lealtad" peronista, castrista o bolivariana no hay catedra), los yanquis explotadores les abren las puertas de sus laboratorios y los ayudan a desarrollar curas para la humanidad.

Si no fuese por Fleiming y la penicilina, Salk y Sabin y las vacunas antipolio y Gallo y el AZN contra el SIDA, hoy nuestra vida media seria la del Africa socialista de Mugabe o el Haiti igualitario de Duvalier: 35 pirulos.

Y si hoy la fiebre porcina amenaza con una pandemia, no falta el imbecil lobotomizado de izquierda que la atribuye (como los idiotas al SIDA) a la maligna ciencia de los laboratorios del Norte.

Pero una vez que terminaron el discurso antiimperialista, entran a pedir a los mismos laboratorios del imperio que les manden vacunas gratis para salvar el pellejo.

Los imperialistas yanquis anuncian que tendrán las vacunas con la temida Gripe A listas para mediados de Octubre -mientras el gobierno popular de Argentina contagia a toda la poblacion adulta anticipando las elecciones y echando a la Ministra de Salud que sugería esperar-

Una vez seguros, les daran una patada en culo a los Milsteins y condenaran a laboratorios de tecnologia ugandesa a los Favaloros (hasta que se matan) y los Leloir que insisten calladamente con el patriotismo serio del cientifico.

Los echaran de la universidad, les daran sueldos de colectivero, probetas rajadas y cubiculos en el subsuelo porque la plata se fue en las moquetas de las oficinas del dirigente sindical ascendido a fuerza de coima a administrador de lo que desconoce.

Y los Maradona de veras -los medicos rurales que trabajan por gallinas- tendran como premio tumbas oscuras y vidas anonimas salvadas, mientras el otro Maradona se compra sus tabletitas de efedrina y se caga en el Mundial, su deporte y los que saben algo con toda su soberbia, para terminar pidiendo entrar al imperio yanqui para curarse. Y cuando se lo nieguen, ira a parar a la Cuba de Castro, a que lo atiendan los doctores Maradona cubanos por dos guitas.

Los que recuerdan la polio del 51 y 52 saben la diferencia entre la "solucion politica" de calear los arboles y la vacuna importada del "imperio".

Pocos de los veteranos que hoy caminan sin muletas se acuerdan de agradecer a Salk, Sabin y los malhadados laboratorios que pusieron los millones de inversion para tener las vacunas antes de la epidemia.

Y cuando ahora amenazan la fiebre avicola o porcina con horrores de pandemia, no faltan los retardados mentales que sin darse cuenta de la contradiccion, acusan a los laboratorios yanquis de producir el mal y la cura y lo vuelven a putear porque la vacuna no llega en 5 dias y no es gratis.

Para los populistas que viven del pobre y del discurso nativista e indigenista, deberiamos prohibir drogas extranjeras, dejando que se traten con yuyos y ritos ancestrales.

Las epidemias serian entonces motivo de alegria por la desratizacion forzada y la limpieza del ambiente de crapulas y mentirosos.

Las drogas que nos curan son el producto de la libertad, del mercado y de la democracia. Por eso aqui no se consiguen.

Cuando vayamos a la farmacia, recordemos al imperialismo yanqui y sus 200 Premios Nobel con un poquito de agradecimiento.



1 comment:

Macedonio said...

Me hizo pensar, Discepolin. Como suele suceder, Argentina esta lejos de la accion y mientras no estornudemos no nos calentamos.
No nos calentamos hasta que nos meten en el pulmotor por no haber suspendido las vacaciones en Mar del Plata cuando ni teniamos vacuna...
Pero hace muy bien en reivindicar a los gringos laboratoristas e inventores gracias a los que tenemos antibioticos, vacunas, blogs,autos, telefonos, en fin, para que seguir si nos conformamos con el dulce de leche y el alambre de puas de la epoca de Sarmiento.
Los amantes de la "teoria de la dependencia" encontraran seguro una excusa para el atraso al que nos condenan al cagar a los que estudian.
Hasta el lenguaje ayuda: antes eran los "bochs", luego los "tragas" y ahora son simplemente unos giles "nerds".
A quien le ganaron Sergei Brin y Bill Gates? Mira como se visten, son unos mamarrachos. Seguro que no saben que decirle a una mina.